Los procesos de participación usuales o administrativos llevados a cabo durante la obra de restauración de la alameda de hércules han acabado siendo un sonado fracaso. La participación no puede ser eficaz sin el ingrediente de la competencia, presente en internet. Pero la zona más activa y en ebullición de sevilla, no podía achicarse ante tal torpe gestión. La actitud de apropiación y propiedad consciente del espacio urbano presente en casi todos los colectivos que funcionan en la alameda han conseguido lo que querían: un espacio público sin acabar, que acaban los ciudadanos o que no acaba nadie, recuperando las teorías del arte participativo. Resulta que las superficies repetitivas, globales y vacías de la serie de bolardos que encierran el tráfico han servido como soporte de expresión y apropiación del espacio urbano. Probablemente sean las partes más participativas y activas de la alameda, de las que estaremos pendientes.
Foto: surconsciente
lunes, 29 de octubre de 2007
LA DISTANCIA ENTRE LAS DECISIONES ADMINISTRATIVAS y LA GEOGRAFÍA URBANA
Publicado por
surconsciente
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16:54
Etiquetas: participación, sevilla
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